El gasto energético de una persona es la cantidad total de energía utilizada para mantener las funciones fisiológicas centrales y en movimiento nuestro cuerpo en el día a día. Está compuesto por:
1) Tasa metabólica basal (TMB)
2) Efecto térmico de los alimentos (ETA)
3) Actividad física = Ejercicio físico + NEAT
Existen factores que afectan significativamente nuestras necesidades energéticas diarias como la edad, composición corporal, estado hormonal, temperatura ambiental y corporal, estados de enfermedad, medicamentos, entre otros.
Entre los componentes destacamos la importancia de la actividad física para aumentar nuestro gasto energético diario y apuntar a este como una intervención para mejorar nuestra composición corporal y estado de salud, ya que podría ser una herramienta esencial para el control del peso corporal. Más allá del ejercicio físico programado que realizamos algunos días a la semana (gym, entrenamiento funcional, deporte en específico, etc), debemos dedicar mayor enfoque al NEAT. Esto considera todas las actividades físicas que requieren un gasto energético adicional y no son programadas, por lo tanto, si motivamos nuestro cuerpo a estar todos los días más activos estaremos gastando mayor energía.
¿Cómo hago para aumentar mi NEAT?
• Prefiere caminar.
• No olvides tu bicicleta como opción de medio de transporte
• Olvida el ascensor y vamos por esas escaleras.
• Intenta estacionar tu auto un poco más lejos del lugar de destino
• Organiza planes que permitan descubrir lugares naturales y disfruta del medio ambiente
• Saca a pasear a tu mascota
• Juega con tus hijos en el parque o realiza actividades dinámicas en tu hogar
• Realiza pausas activas en tu trabajo
!No olvides este consejo¡ Siempre motivados para aumentar nuestro NEAT diario. Además, si lo complementan con una alimentación saludable, una correcta hidratación, ejercicio físico semanal y descanso…. Pueden obtener excelentes resultados.
